El sesteo intrínseco de Rajoy, parece, como arte del “birlibirloque”, haberlo trasvasado al conjunto de su gobierno al estar en funciones: pocos saben y ninguno contesta.
Es el caso de José Manuel Soria, todavía Ministro de Industria, Energía y Comercio del Reino de España. La siesta inoculada de Rajoy ha hecho estragos en casi todo el gabinete; ahí están los actuales silencios del dicharachero Montoro. Pero lo del Ministro Soria se agrava aún más, porque algo de fábrica ya traía. En Extremadura, por su responsabilidad en la cuestión de las renovables, sabemos bien de su pérfida gestión y su poco compromiso con esta tierra.
Ahora, en la postrimería de su ministerio, lejos de rectificar, ahonda en la herida. Es el caso de la mina Agua Blanca de Monesterio, el abandono a su suerte de 400 familias, el desdén a esta región y a toda su gente.
¡Soria, despierta. En tus manos está! ¡Mira a nuestros ojos, actúa y salva el empleo de AguaBlanca!
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