Los Presupuestos de
Extremadura para 2016 han salvado su primer escollo en su segunda intentona. No
ha prosperado la enmienda a la totalidad planteada por Podemos y
consiguientemente siguen su tramitación parlamentaria hasta el 1º de abril.
Como he reiterado en
otras ocasiones, aunque ya vamos tarde y se ha perdido un tiempo precioso,
Extremadura necesita disponer de Presupuesto como “el comer”. Nunca mejor
dicho, pues lo segundo, desgraciadamente, en demasiadas ocasiones está
dependiendo de lo primero.
Las diferencias entre
el proyecto de Presupuestos que hoy sigue adelante en la Asamblea y el que se
tumbó en noviembre pasado son tan mínimas que es difícil apreciarlas en su
contenido. De los 83,5 millones de más que contienen los ingresos, 78 están en
el aire al depender de terceros (deuda histórica, sobre ejecución fondos UE y
venta de activos).Vamos que si no están no se gastan. En la práctica los gastos
persisten casi inalterables.
Un viaje escaso para
tantas alforjas. Señorías: mejoren el Presupuestos, pero apruébenlo.
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